El 2020 fue un año de grandes desafíos debido a una de las situaciones económicas universales más preocupantes, producto de la grave crisis sanitaria, económica y social generada por la pandemia de COVID-19.

Según el Banco Central, “el desempeño económico mundial durante el año 2020 estuvo afectado significativamente por la rápida propagación del virus del COVID-19, que dio como resultado la declaración de pandemia a nivel internacional y la adopción de fuertes medidas de confinamiento con el objetivo de limitar el contagio. La crisis sanitaria provocó el cierre de las actividades productivas y la paralización de los flujos comerciales y turísticos, rápidamente transformándose en la más profunda recesión global desde la Segunda Guerra Mundial hace más de 70 años, estimándose una caída de -4.3 % en 2020”.

En ese contexto, la economía dominicana también experimentó una de las crisis financieras más severas de su historia. La pandemia afectó principalmente las exportaciones y el turismo. Asimismo, el comercio y la construcción fueron impactados de manera severa. La autoridad monetaria informó recientemente que la economía terminó el año con una variación interanual del Producto Interno Bruto de –6.7 %.

Para preservar la estabilidad del sistema financiero dominicano ante los efectos de la pandemia, las autoridades del Banco Central aplicaron un conjunto de medidas monetarias expansivas, incluyendo reducciones importantes de la tasa de política monetaria, la aprobación de facilidades para provisión de liquidez y cambios temporales en medidas regulatorias.

En correspondencia con esta situación, el Consejo de Administración del Banco BHD León determinó el establecimiento de líneas de acción para enfrentar el 2020. Estas medidas especiales, definidas exclusivamente para el contexto del año de la pandemia, fueron ejecutadas en cumplimiento de la encomienda del Consejo, logrando que los resultados del Banco fueran satisfactorios. Esas líneas fueron: garantizar la continuidad de las operaciones, cuidar la salud de colaboradores y clientes, ofrecer acompañamiento y facilidades a los clientes, proteger la sanidad del balance, apoyar a la sociedad dominicana y formular el plan estratégico 2021-2025.

Estas iniciativas significaron una rápida adaptación de las operaciones. Se priorizaron el bienestar y la seguridad de colaboradores y clientes, se garantizó la continuidad de los canales de atención y se adecuaron los procesos e infraestructura para soportar el trabajo remoto. A esta gestión se sumó mayor proactividad en el servicio a los clientes, con cercanía y entendimiento de sus necesidades, ofreciéndoles alivios económicos y facilitándoles soluciones para colaborar con su salud financiera. Asimismo, se implementaron medidas para mitigar los riesgos de crédito, liquidez y solvencia, logrando indicadores que mantuvieron al Banco en una buena posición.

El apoyo a la sociedad fue evidente en la responsabilidad social de la empresa de contribuir con los grupos de personas más vulnerables durante la pandemia con la cobertura de necesidades de salud, aportando a la solución de las dolencias sociales y velando por el bienestar humano.

Tuvo igual importancia el desarrollo de un plan estratégico de transformación integral para adaptar a la organización al nuevo orden mundial impuesto tras la pandemia de COVID-19. Para ello, fueron revisados el propósito y la visión del Banco y se definieron enfoques a lograr para el 2025.

Es concluyente que el 2020 fue un período de riesgos económicos y financieros, pero también personales, organizacionales y sociales, en el cual el Banco BHD León se concentró en un ejercicio de banca responsable, innovadora y cercana. Desde el punto de vista de los negocios cuidó la calidad de la cartera, desarrolló la banca transaccional y digital, y potenció los negocios del Centro Financiero BHD León. Todo esto fue logrado gracias a un movimiento colectivo que unió voluntades y esfuerzos dentro de la institución: pensar y trabajar en unidad, como un gran equipo, en beneficio de clientes y colaboradores.